El otro día hice estas albóndigas de pollo con verduras que en casa nos encantan. Es una receta que hace tiempo publiqué en el blog y es una de las que más éxito tiene. Cada vez que me pongo hago mucha cantidad y vamos tirando de ellas durante varios días hasta que se acaban. Solemos acompañarlas de arroz, de quinoa o de una ensalada, pero esta vez, les hice un acompañamiento nuevo súper sencillo que me encantó y que es la razón de que comparta este plato con vosotros. Son unos espaguetis de calabacín con jengibre.
Antes de hacerlos pensé que el jengibre les iba a dar un toque muy fuerte, pero mi sorpresa fue descubrir que todo lo contrario. Pico el jengibre muy fino y lo doro en la sartén como si fuera ajo, luego añado el calabacín para darle unas vueltas juntos y en 2 minutos lo tienes listo. Le da un toque de sabor especial pero suave, me ha encantado. Es uno de los grandes descubrimientos que he hecho últimamente y seguiré probando a sustituir el ajo por jengibre en diferentes platos.
Os dejo la receta de este plato completa, aunque la de las albóndigas la tenéis más detallada en este post: Albóndigas de pollo con verduras. Espero que os animéis a probar el toque de jengibre, seguro que os sorprende como me ha pasado a mí.
- 2 calabacines
- Un trozo de jengibre (tamaño como 2 cm)
- Pizca de sal y de pimienta
- Para las albóndigas: 500 gr de pechuga de pollo picada, 1 zanahoria, 1 calabacín, un puñado de espinacas, sal, pimienta y un poco de harina (yo uso de avena, solo hace falta triturar los copos)
- Para la salsa española: 1 cebolla grande, 1 diente de ajo, 2 zanahorias, 800 ml agua.
- empieza preparando la salsa: pica la cebolla, el ajo y las zanahorias y cocínalos en una sartén con un poco de aceite, sal y pimienta. Añade el agua y deja que hierba hasta que la salsa espese. Tritúrala y reserva.
- Mientras se hace la salsa prepara las albóndigas: ralla el calabacín y la zanahoria en crudo y mézclalos con la carne picada. Añade unas espinacas frescas cortadas muy fino con el cuchillo, un poco de sal y de pimienta. Mezcla bien y forma las bolitas de las albóndigas. Pásalas por un poco de harina (en mi caso de avena) y fríelas en una sartén con muy poco aceite. Vete dándoles vueltas hasta dorarlas por todos lados. Vete colocándolas en el recipiente donde tengas la salsa.
- Y por último, haz los espaguetis de calabacín con un spiralizer o mandolina. Pela un trozo de jengibre y pícalo como si fuera un ajo. Dóralo en una sartén con un poco de aceite de oliva, ten cuidado de que no se te queme o amargará el plato. Cuando el jengibre empiece a dorarse, añade los espaguetis de calabacín y dales unas vueltas. Solo para que se calienten, en menos de un minuto están listos.
- Sirve las albóndigas con los espaguetis de calabacín y ¡a disfrutar de este riquísimo plato!