Suave y cremosa. Así es esta receta de espinacas a la crema con huevo al horno. Un plato delicioso y cien por cien saludable. No he utilizado nata, ni mantequilla, ni nada súper gordo para hacer la crema. Es una bechamel de calabacín, y está hecha solo con cebolla, calabacín y un poco de leche (en mi caso de avena).
En este plato, calorías las justas, mucho sabor, y disfrute máximo.
Puedes preparar las espinacas con antelación y cuando las vayas a comer, cuajar el huevo en el horno. Así se calentará todo junto. En 6 minutos estará listo. Justo el tiempo en que tarda en cuajarse la clara, y que la yema se quede blandita.
Por encima, un poco de cilantro fresco y chile seco para darle ese toque picantito al que últimamente me estoy aficionando. Y esta vez sí, un poco de pan para untar esa delicia de yema.
- 1 bolsa de espinacas frescas
- 1 cebolla
- Un puñado de setas shiitake (o champiñones)
- 2 huevos (ecológicos mejor)
- 1 cucharada de AOVE (aceite de oliva virgen extra)
- Una pizca de pimienta
- Un poco de sal
- Un poco de cilantro fresco picado
- Un poco de chile seco (opcional picante)
- Bechamel de calabacín: ½ cebolla, 1 y ½ calabacín, 1 cucharada de AOVE, 200 ml de leche (de avena o de vaca), un poco nuez moscada.
- Prepara la bechamel de calabacín. Corta ½ cebolla en juliana y rehógala en un cazo con 1 cucharada de AOVE. Pela el calabacín, trocéalo y añádelo al cazo con la cebolla. Tapa y deja que se cocine 8-10 minutos a fuego medio. Incorpora la leche, vuelve a tapar y deja que hierba suavemente otros 8 minutos. Añade un poco de sal y nuez moscada rallada. Tritura con la batidora.
- Enciende el horno para que esté caliente cuando vayas a meter los huevos. 250º, calor arriba y abajo.
- Corta 1 cebolla en juliana y rehógala en una sartén con un poco de AOVE (1 cucharada). Cuando la cebolla esté blanda, incorpora las setas laminadas.
- Añade las espinacas a la sartén. Puede parecerte que son muchas y que se desbordan. Las espinacas reducen muchísimo una vez que se calientan. Vete incorporándolas poco a poco a la sartén y verás cómo te caben todas. Añade un poco de pimienta y sal.
- Vete añadiendo poco a poco la bechamel de calabacín y mezclándola con las espinacas. No hace falta que utilices toda la que has hecho. Añade hasta que esté a tu gusto.
- Haz un hueco entre las espinacas para cada huevo que vayas a poner. Casca el huevo en cada hueco y mete la sartén en el horno a 250º durante 6 minutos.
- Cuando vayas a servir, espolvorea un poco de cilantro fresco y chile seco por encima.