Llega la primavera y con ella el buen tiempo, los días más largos, el sol, las ganas de comer sano, y las ensaladas. Hoy os traigo una receta diferente, en la que sustituimos la lechuga por espinacas, y utilizamos fruta en lugar de ingredientes salados. Una ensalada muy sana, baja en calorías y muy sabrosa, que ya se ha convertido en todo un clásico de los libros de recetas: Ensalada de espinacas baby, fresas, mango y semillas de amapola.
Las semillas de amapola le dan una textura diferente. Son negras y pequeñas. Te sonarán por verlas encima de algunos panes. Os animo a introducir semillas en vuestros platos, son pequeñas pero muy grandes en beneficios para la salud. Las semillas de amapola, aportan calcio y vitamina A con su efecto antioxidante y protector de la piel y el cabello. Son ricas en hierro, y actúan como calmante nervioso del organismo.
Una receta de ensalada diferente y divertida!
- Espinacas baby
- Fresas
- Mango
- Cebolla roja
- Queso azul o gorgonzola
- Semillas de amapola
- Aceite de oliva
- Vinagre de manzana / vino / módena
- Mostaza en grano
- Sal
- Prepara el aliño en un bol. Mezcla un chorrito de aceite de oliva virgen, un poco de vinagre, una cucharadita de mostaza y un poco de sal. Emulsiona batiendo con un tenedor.
- Mezcla las espinacas con el aliño, que se queden pringaditas pero no en exceso. Retira y ponlas en la ensaladera.
- Lava las fresas, corta la parte verde y las ábrelas por la mitad. Pela el mango y córtalo en daditos. Parte la cebolla en juliana fina y añade todo a la ensaladera.
- Reparte trocitos de queso por la ensalada y termina espolvoreando semillas de amapola por encima. Sirve bien fría.